El CD Leganés está interesado en varios jugadores del recién descendido Girona, además del portero Yassine Bono. Uno de los jugadores por los que ha preguntado es Borja García, mediocentro ofensivo que puede jugar de interior por ambos lados. Tiene 28 años y esta temporada ha jugado 33 partidos y ha marcado un gol.
El centrocampista madrileño tiene contrato hasta 2022 y cuando el Leganés ha preguntado por él, la respuesta del Girona es que si le quiere tendrá que pagar los 7 millones de euros de su cláusula. Los gerundenses quieren que se quede, tanto que le han hecho una oferta que mejora económicamente las tres temporadas que aún tiene firmadas en Montilivi.
Además, otro nombre del Girona que maneja el Leganés es el de Pere Pons, jugador que también interesa al Alavés de Asier Garitano. Los vitorianos han ofrecido 2 millones de euros, mientras que el Lega aún no ha hecho ninguna oferta formal. Tiene contrato hasta 2020 y su precio tras el descenso es de 2 millones de euros.
¿POR QUÉ EL LEGA QUIERE PESCAR EN EL GIRONA?
Porque es un equipo que ha jugado con 5-3-2 en las últimas temporadas con Pablo Machín (antes de Eusebio) y hay jugadores que encajarían perfectamente en el esquema que ha utilizado Pellegrino en esta liga, porque en principio y dependiendo de los jugadores que se fichen, el Leganés va a seguir trabajando con ese 5-3-2, a no ser que el mercado y las incorporaciones obliguen a usar otro esquema.